Como es sabido, Andrea Casiraghi ocupa el tercer lugar en la sucesión al principado después de su madre, la princesa de Hannover. Ante la falta de herederos legítimos de su tío, podría terminar por acceder algún día al trono. Pero, para ello, la Constitución del Principado exige que esté casado por la Iglesia. El primogénito de Carolina y Tatiana Santo Domingo regularizan de esta forma su relación tras siete años de noviazgo y tras el nacimiento de su primer retoño, Sacha, el pasado 21 en Londres.
Tres días ha durado la boda religiosa entre Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo, una ceremonia caracterizada por la originalidad y que ha reunido en el pueblo suizo de Gstadd alrededor de 300 invitados. Así, aunque los grandes protagonistas no hayan querido, al menos hasta la fecha, compartir las imágenes de su segundo 'sí, quiero', sus invitados no han podido resistirse a la idea de publicar a través de las redes sociales algunos de los detalles de la celebración. Las imágenes más esperadas del fin de semana. Macarena García puso el acento español en la ceremonia.
Tras recibir a los invitados la pasada noche del viernes con una exclusiva cena en el The Eagle Ski Club, desde donde los más atrevidos pudieron bajar al pueblo desde las pistas de esquí, Tatiana y Andrea contaron las horas para desfilar hasta el altar.
A las siete de la tarde del sábado, la iglesia romántica de San Nicolás se convertía en el escenario del segundo sí, quiero de la pareja, siendo la cena nupcial en el Hotel Palace.
Antes de la ceremonia, la pareja, junto a la princesa Carolina de Mónaco, Charlotte Casiraghhi y Alexandra de Hanover, bautizaron a su hijo Sasha en la iglesia de San José y es que no hay duda de que el feliz matrimonio ha querido comenzar el 2014 a lo grande.
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